martes, 20 de enero de 2009

OBAMA ES MARADONA

Viste la asunción de Obama? Es la primera vez que me dan ganas de ser norteamericano (lo digo sin ironía y sin desmedro del sentimiento anti-imperialista). Parecía esas escenas de las películas demagogas yanquis en donde los negros se abrazan con los blancos (¡¡y hasta con los chinos!!), las hijas del presidente (joven, buen mozo y simpático) le sacan fotos con la camarita digital (vi a una de las hijas hacerlo, como si no tuviera a su disposición todas las grabaciones y comunicaciones del mundo-incluida la presente-A la pobre no le cae la ficha todavía) y los padres del presidente (él de Kenia, como decir de Villa Fiorito) aplauden de pie a su hijo electo al ser mencionados en el discurso de éste en el momento de autoreferenciarse como la realización más cabal del sueño americano. Pero sobre todo, fue conmovedor el contenido integrador -puertas adentro y puertas afuera- de su discurso. Habrá qué ver cómo nos toca a nosotros este asunto. George W., entretenido en destruir Irak para quedarse con el petróleo, casi no le dio pelota a Latinoamérica (por suerte porque si no, nos cagaba a tiros por el agua o por la soja). Vamos a ver qué se trae este muchacho bajo el traje desarmable (estilo striper según el sagaz comentario del periodista de TN; el mismo reportero que, mientras elogiaba el dispositivo de seguridad aérea protector de la salida del helicóptero que transportaba a Bush, expresaba en voz alta su deseo-falso-de que los disparadores de salva que saludaban su alejamiento apuntaran para otro lado, no sea cosa que la fueran a dar a la aeronave justo en ese momento. ¡¡¡Son de salva!!!, tonto!!!! Suenan como tiros, pero no son tiros, son como la cebita, imbécil!!!).
Otra del pintoresquismo local: el mismo u otro periodista clarinete elogiaba también el dispositivo de seguridad pedestre que estaba allí dispuesto para resguardar que nadie (¡¡¡2 millones y medio de personas!!!! ¡¡¡Ni Los Fronterizos cuando se reecontraron en el Chateau Carreras!!!) entrara con un elemento contundente (sic).
¿Un elemento contundente entre semejante multitud?- pensé.
Ah!, ya sé!!-me dije-Por ejemplo, un argentino vendiendo choripan: (alo chori, alo chori, calentito los chori!! ). Aunque, para el caso hubiera sido más oportuno el mismo espécimen vendiendo morcipan (chiste políticamente incorrecto y feo. Borrar.) Y al lado, desde luego, otro compatriota agitando los hilos (no sin cierto alegórico revanchismo a la manera de la dialéctica del amo-esclavo hegeliana) de unos muñequitos-títeres negros vestidos con un trajecito blanco y más parecidos a Al Johnson en el Cantante de jazz que a Obama: Vamo, vamo al muñequito Obamita , al muñequito. ¡¡Cómo baila el muñequito!!
¿Algo más? desde luego: algunos muchachos (incorregibles al decir borgeano) con el bombo y cantando la marchita (sin omitir el afinado énfasis en la parte de "combatiendo al capital").
En fin, eso sí que sería una verdadera y colorida fiesta. Contundente, sobre todo.
¿Cómo rematar estas fugaces impresiones? La mejor manera que se me ocurre es con un comentario de un colega sagaz, que, cuando Obama resultó electo, opinó con un brillito astuto en los ojos: "Por estas horas y estos lares debe haber alguno que crea que porque Obama es negro es de izquierda, progresista y lee el Página 12."
Chapeau.

Ricardo